2ª Edición Taller Lactancia: la información es poder
"Después del parto, sentía una ansiedad constante, como si no estuviera haciendo nada bien. No dormía, no disfrutaba, solo me preocupaba. Con Ana trabajé esa ansiedad a través de audios de hipnosis que me devolvieron a mi centro, aprendí a calmar mi mente, a confiar en mí y a soltar la culpa. Ahora disfruto a mi bebé sin ese nudo en el pecho."
"Cuando nació nuestra hija pensábamos que lo teníamos todo bajo control… hasta que llegaron las primeras noches. Ana apareció como un verdadero ángel. Nos dio paz, nos enseñó rutinas sencillas y nos transmitió seguridad en cada cuidado. Gracias a ella pudimos descansar y disfrutar de esos primeros días sin sentirnos desbordados. No solo cuidó de nuestra bebé, también cuidó de nosotros como padres primerizos. La recomendaríamos una y mil veces"
"Acudí a Ana, por recomendación de una amiga, porque mi lactancia estaba siendo una montaña rusa de dolor, dudas y lágrimas. En un par de sesiones me dio más claridad y confianza que todo lo que había leído en internet y las opiniones no solicitadas. Me enseñó posturas, para resolver grietas y, sobre todo, me devolvió la confianza en mi capacidad para alimentar a mi bebé. Hoy, tres meses después, seguimos disfrutando de una lactancia feliz y sin culpas. Gracias Ana por tu acompañamiento tan humano y respetuoso"
Asesoría de lactancia
"Mi pareja y yo llegamos a la sesión con Ana llenos de miedos y con mil preguntas sobre el parto. Salimos con una calma increíble. Su forma de explicarnos todo y enseñarnos las técnicas de respiración y visualización nos cambió la mirada por completo. Sentimos que por fin teníamos herramientas reales para vivir el nacimiento de nuestro hijo desde la confianza y no desde el miedo. Fue un antes y un después. No sabemos cómo será el parto, pero sí, que vamos preparados para todo, siendo equipo."
"Teníamos miedo de no saber reconocer las necesidades de nuestro bebé recién nacido y el cansancio nos estaba pasando factura. Contar con Ana fue como tener a una amiga experta al lado: nos enseñó a bañar a nuestro hijo, a interpretar sus señales y, lo más valioso, nos devolvió la tranquilidad para disfrutar de nuestra nueva vida en familia. Dormir sabiendo que alguien de confianza cuidaba de nuestro bebé no tiene precio."
"La llegada de mellizos fue una revolución. Las noches eran interminables y nos sentíamos al límite. Ana fue nuestra tabla de salvación: organizó rutinas básicas, nos dio consejos prácticos y con su calma contagiosa transformó el caos en armonía. Sentimos que fue un apoyo emocional enorme. Sin ella, esos primeros meses habrían sido mucho más duros."
"Pensaba que dar el pecho sería algo instintivo y sencillo, pero la realidad fue muy diferente y aunque había leído algunas cosas, cuando llegó el momento me sentí bastante perdida. Contactar con Ana fue el mejor regalo que pude hacerme: me escuchó sin juicios, me ofreció soluciones prácticas y me recordó que yo también importaba en el proceso. Ahora disfruto de las tomas sin dolor y, sobre todo, con mucha más serenidad. Ojalá todas las madres tuvieran este tipo de acompañamiento desde el inicio."